De Campesino a Astronauta

En “De Campesino a Astronauta” José M. Hernández, de diez años, vio los viajes lunares del Apolo 17 en blanco y negro en la vieja televisión de su familia en 1972 y supo lo que quería ser cuando creciera: un astronauta. Más tarde esa noche le dijo a su padre y se sorprendió cuando su padre le dijo: "¡Puedes hacer esto, m’ijo!". El Sr. Hernández le dijo a su hijo que si realmente quería convertirse en astronauta, necesitaría seguir una receta simple de cinco ingredientes para tener éxito. En los años que siguieron, José seguiría esta receta mientras obtenía títulos de licenciatura y maestría en ingeniería eléctrica. Añadiendo su propio ingrediente, perseverancia, se postuló once veces al programa de astronautas de la NASA y fue rechazado cada vez. Finalmente, en 2004 fue seleccionado para formar parte de la clase 19 de astronautas estadounidenses. Logró su sueño en 2009 cuando se desempeñó como ingeniero de vuelo en el transbordador espacial Discovery en la misión de catorce días STS 128 a la Estación Espacial Internacional.